La Novena Sinfonía de Beethoven

La Novena Sinfonía de Beethoven es una de las composiciones más magistrales en la historia de la música clásica y una de las más emblemáticas del compositor. Es una sinfonía reconocida universalmente que celebra la fraternidad y la hermandad de la humanidad y que podrás ver en directo próximamente en Les Arts de Valencia bajo la dirección de Vasily Petrenko.

¿Quién compuso la Novena Sinfonía?

La Sinfonía Número 9 en re menor, Op. 125, “Coral” fue compuesta por Ludwig Van Beethoven (1770 – 1827) entre los años 1822 y 1824. El estreno de esta obra maestra tuvo lugar el 7 de mayo de 1824 en el Theater am Kärntnertor de Viena, bajo la dirección de Michael Umlauf y la supervisión del mismo Beethoven. El estreno marcó el regreso del compositor tras diez años de ausencia del ojo público debido a problemas de salud que persistieron hasta su fallecimiento tres años después.

El Himno de la alegría de Beethoven

La Novena Sinfonía, también conocido como el Himno de la alegría de Beethoven, se compuso por encargo de la Sociedad Filarmónica de Londres. La composición está basada en el poema “Oda a la Alegría” de Friedrich Schiller, publicado en 1793. Beethoven empatizó con los mismos sentimientos que manifiesta el poeta y fue lo que lo inspiró a empezar a musicalizarlo a sus 23 años de edad, que resultó en una de las sinfonías más icónicas e importantes de la historia de la música.

En 2002, la Novena Sinfonía de Beethoven, fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Los instrumentos de la Novena sinfonía de Beethoven

Los instrumentos de la Novena Sinfonía de Beethoven son impresionantemente variados y completos. Cada sección de la orquesta, desde los vientos hasta las cuerdas, y las voces corales, contribuye de manera crucial a la creación de una experiencia musical asombrosa y emocionante.

Los vientos, que incluyen flautas, oboes, clarinetes y fagots, aportan una riqueza tonal y melódica añadiendo matices y profundidad a la música, destacándose en momentos clave de la composición.

Los metales, compuestos por trompas, trompetas y trombones, aportan un brillo y poder al sonido, contribuyendo a su majestuosidad y grandeza.

La percusión, que incluye timbales, bombo, triángulo y platillos, agrega una dimensión rítmica y dramática. Los timbales, en especial, proporcionan un impulso rítmico importante, mientras que los platillos aportan un efecto brillante y explosivo en ciertos momentos, como el clímax del último movimiento.

Las cuerdas, compuestas por violines, violas, cellos y contrabajos, forman la base armónica y melódica de la sinfonía. Estas secciones crean una riqueza tonal profunda y emotiva, proporcionando una base sólida para la melodía y la armonía.

Finalmente, las voces corales, soprano, contralto, tenor y coro, son un elemento distintivo de la Novena Sinfonía. Introducen un aspecto humano y emocional a la música, transmitiendo la poderosa “Oda a la Alegría” de Schiller. Estas voces, tanto solistas como coro, se unen al conjunto orquestal en el último movimiento, generando un clímax impresionante y lleno de emoción. Las partes soprano y altos solistas fueron interpretados por Caroline Unger y Henriette Sontag, jóvenes y famosas cantantes de la época.

Estructura de la sinfonía n.º 9 de Ludwig Van Beethoven

Beethoven fue el precursor del movimiento romántico en la música del siglo XVIII, promoviendo una composición mucho más libre e independiente de las convenciones musicales de la época. El compositor realiza transformaciones rítmicas a lo largo de la estructura de la sinfonía n.º9, rompiendo con las convenciones del clasicismo musical. En esta sinfonía, Beethoven introdujo la percusión por primera vez, elevando la expresividad de la partitura. Además, la incorporación de un coro en el cuarto movimiento añade un impresionante clímax a esta obra maestra.

Todo ello es notablemente visible en los cuatro movimientos principales que componen la estructura de la Novena sinfonía:

I. Allegro ma non troppo, un poco maestoso, en re menor.
II. Scherzo. Molto vivace, en re menor – Presto, en re mayor.
III. Adagio molto e cantabile, en si bemol – Andante moderato – Tempo Primo – Andante moderato – Adagio – Lo stesso tempo.
IV. Finale. Recitativo.

La interpretación del Himno de la Alegría de Beethoven tiene una duración aproximada de 65 minutos.